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Nutrición en la preconcepción

preconcepcion

La alimentación saludable es importante en cualquier etapa de la vida, pero durante la preconcepción, embarazo y la etapa de lactancia es fundamental.

Cada vez se evidencia más que la etapa fetal tiene muchos más efectos, para toda la vida sobre el nuevo ser de lo que se pensaba anteriormente.

Antes de 1940, se sabía poco acerca de las causas de las malformaciones congénitas en el ser humano, posteriormente se determinó que muchas de las anomalías del feto provenían de alteraciones cromosómicas, como es el caso del Síndrome de Down.

Otras a enfermedades padecidas por la madre en los inicios del embarazo como es el caso de la rubeola o la exposición de la gestante a radiaciones como ocurre en la toma de una radiografía, consumo de medicamentos como la talidomida, o tóxicos como el cigarrillo, el licor u otras drogas adictivas.

Adicionalmente, consumo insuficiente de algunos alimentos que pueden determinar el desarrollo defectuoso de algunos órganos como el tubo neural, (el tubo neural es el que da origen al desarrollo del cerebro y cerebelo y la columna vertebral).

Por ejemplo, el bajo consumo de vitamina B9 o ácido fólico o folato que se encuentra naturalmente en los alimentos, como hortalizas de hojas verdes, frutas cítricas y frijoles.

Alimentación previa al embarazo en la mujer y el hombre.

La nutrición óptima durante el embarazo, que consiste en cantidades adecuadas de los macro y micronutrientes, realmente comienza antes de la concepción, dado que el feto en desarrollo depende únicamente de la transferencia de sustratos desde su madre, no existe otro medio intrauterino de adquirir los nutrientes.

Por lo tanto, el estado nutricional de la mujer que aspira a quedar en embarazo puede condicionar de forma definitiva el desarrollo del producto de la concepción.

pareja cocinando

Imagen 1. Importancia de la alimentación en la preconcepción, fuente: Gorodenkoff & Shutterstock.

Se ha demostrado que los cambios dietéticos disminuyen los trastornos ovulatorios y mejoran la fertilidad. La deficiencia de vitamina D en hombres y mujeres puede asociarse con infertilidad (Pludowski et al.,2013).

En mujeres, la deficiencia de vitamina D puede asociarse con resistencia a la insulina y síndrome metabólico en el síndrome de ovario poliquístico. Adicionalmente se ha detectado que la deficiencia de vitamina D puede ser mayor en las mujeres con obesidad, con IMC mayor de 30; en los hombres se asocia con valores más bajos de testosterona y menor calidad de esperma.

Se ha evidenciado que el calcio es importante en hombres para la formación de espermatozoides, la motilidad espermática, la hiperactivación y las reacciones del acrosoma (zona del esperma que contiene enzimas digestivas que degradan las capas externas del óvulo).

Los recuentos espermáticos más sanos se relacionan con un aporte dietético óptimo de zinc, ácido fólico y antioxidantes, así como con la abstinencia del tabaco y el alcohol. (Gaur et al.,2010).

Las recomendaciones para mejorar la fertilidad masculina consisten en la ingesta elevada de fibra, un menor índice glucémico (como productos lácteo ricos en grasas y grasas monoinsaturadas, reduciendo las grasas trans) y una dieta baja en proteínas animales, además de la obtención de hierro de origen vegetal, consumo diario de polivitamínicos y la actividad física moderada (Simon, 2014).

Actualmente se insiste en el consumo de suplementos de ácido fólico en el periodo periconcepción, sin embargo, se ha determinado que muchos otros son fundamentales. La ingesta óptima se asocia con un menor riesgo de lactantes con retraso del crecimiento (bajo peso al nacimiento o pequeños para la edad gestacional), o de nacimientos pretérmino (Ramakrisnan et al.,2012).

Por ello, los suplementos multivitamínicos y minerales preconcepción pueden conferir más beneficios que los suplementos únicos para la mujer ya embarazada.

Cuadro 1. Nutrientes importantes en el periodo de preconcepción. Fuente: L.Kathleen Mahan, Janicel L.Raymond.

Sistema o función

Nutrientes

Encéfalo y sistema nervioso

Hierro, zinc, yodo, ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga, vitamina A, B6, B12, ácido fólico, cobre, proteínas, selenio.

Función y estructura placentaria

Hierro, ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga, vitamina E, C, B12, zinc, selenio, cobre, ácidos grasos poliinsaturados, omega 3, folato

Inflamación y función inmunitaria

Vitaminas A, D, zinc, ácidos grasos

Estrés oxidativo

Vitaminas C, E, B6, B12, ácido fólico

Formación del embrión

Vitaminas A, B6, B12, ácido fólico, zinc

Cambios fisiológicos en el embarazo.

cambios durante el embarazo

Imagen 2. Esquema comparativo de los cambios anatómicos de diferentes órganos en el embarazo (derecha), respecto a una mujer no embarazada (izquierda).

Volumen sanguíneo.

El volumen sanguíneo total se encuentra aumentado un 35% aproximadamente, sin embargo, diferentes factores pueden afectar dicha cifra, entre otros, se pueden mencionar: la posición, el estado emocional, los cambios de temperatura y la alimentación de la gestante.

El volumen plasmático (El plasma es un líquido transparente y ligeramente amarillento que representa el 55 % del volumen total de sangre), aumenta cerca del 50% por encima del promedio encontrado en la mujer no embarazada.

Estos aumentos ocurren desde etapas tempranas de la gestación, a partir del primer trimestre el volumen se incrementa hasta finales de la semana 34, cuando se sostiene así hasta el momento del parto. Regresa a sus valores normales cuando ha terminado el puerperio.

El aumento del volumen sanguíneo produce una disminución de los valores de hemoglobina, albúmina sérica, otras proteínas séricas y vitaminas hidrosolubles (aquellas que no se almacenan en el cuerpo: vitamina C y todas las B), principalmente después del final del primer trimestre.

En cambio, las concentraciones séricas de vitaminas liposolubles y otras fracciones lipídicas como triglicéridos, colesterol y ácidos grasos libres aumentan para asegurar un transporte suficiente al feto.

Corazón.

Los estudios de Binhold y Gemsell, citados por Eastman y Hellman, demostraron un aumento en el volumen cardiaco debido a una hipertrofia y dilatación, especialmente de las cavidades izquierdas del corazón, que puede aumentar hasta 30 gramos de peso.

Uno de los cambios fisiológicos más importantes, es el aumento de la capacidad contráctil del corazón para expulsar la sangre que recibe. Lo anterior tiene su principal ocurrencia alrededor de la semana 28, disminuye hacia el final del embarazo y se normaliza después del parto.

Sistema Respiratorio.

Quizás, el cambio mas importante desde el punto de vista respiratorio, es la disminución de la capacidad pulmonar por la elevación del diafragma a medida que progresa el embarazo.

El ascenso es de unos 4 cm, existe un ensanchamiento del tórax porque las costillas pueden sobresalir y modifican la configuración de la caja torácica; el diámetro transverso se aumenta 2 cms. El volumen respiratorio y el espiratorio aumentan progresivamente a medida que la gestación avanza y al final puede encontrarse un 40% por encima de los niveles de los de una mujer no embarazada.

La capacidad pulmonar disminuye un 5%, la frecuencia respiratoria aumenta. Lo anterior, conduce a una hiperventilación materna durante la gestación normal.

Sistema Gastrointestinal.

El reflujo gastroesofágico, la esofagitis y la hernia hiatal, puede ocurrir entre un 25% a 70% de las mujeres embazadas, se presenta además disminución del ph gástrico.

El estreñimiento es muy frecuente durante el embarazo por el efecto ocupación de espacio del útero, la deshidratación y la dieta baja en calorías son factores de riesgo para el desarrollo de cálculos biliares.

La vesícula biliar también sufre los mismos efectos sobre la motilidad y su vaciamiento es más lento.

El agrandamiento de las encías y las caries dentales son frecuentes durante el embarazo probablemente debido a los cambios de pH de la saliva debido a las modificaciones en su constitución.

En centro nervioso del apetito se puede estimular durante el embarazo, especialmente al final del mismo.

Sistema Urinario.

Durante la gestación normal se produce un aumento del volumen del riñón y una dilatación de los cálices, de la pelvis y de los uréteres, al final del embarazo con frecuencia se presenta ardor al orinar y orina frecuente debido a que el crecimiento del útero hace presión sobre la vejiga.

Debido al estasis urinario que ocurre, la embarazada esta más predispuesta a sufrir de infecciones urinarias.

Sistema Nervioso Central.

El estado emocional de la embarazada se encuentra alterado, especialmente durante el tercer trimestre, se queja de depresión, fatiga y ansiedad la cual desencadena aumento del apetito.

Una queja frecuente al comienzo del embarazo es el sueño, el cual se exagera durante esta etapa, la causa aun es desconocida.

Metabolismo.

Durante la gestación se ha demostrado hiperlipidemia, la cual generalmente se hace manifiesta desde el tercer mes.

El agua corporal total aumenta continuamente a lo largo de todo el embarazo, la ganancia de peso esta relacionada con la retención de agua la cual se calcula entre 6 y 8 litros.

La retención de agua desaparece durante los tres primeros días del post parto debido al aumento de la diuresis. El edema puede aparecer en la mitad de las embarazadas con tensión arterial normal y se relaciona mas con el incremento exagerado de peso corporal.

Ganancia de peso.

Uno de los aspectos que hay que vigilar cuidadosamente es la ganancia de peso corporal materno. Siempre se ha tenido como un indicador significativo en relación con el desarrollo normal o anormal de la gestación. Para este control es importante tener conocimiento del peso previo de la mujer antes de su embarazo.

Durante la gestación existen dos fases relacionadas con el metabolismo de las proteínas y de los nutrientes. La primera llamada anabólica, es en la cual se acumulan las proteínas en los tejidos maternos y la segunda la catabólica, que es en la cual el feto utiliza las proteínas para su alimentación.

El comité Americano de Obstetricia y Ginecología acepta como ganancia ideal de peso durante la gestación entre 10 y 12 kg. Con este incremento se ha logrado disminuir las complicaciones durante el embarazo y el parto, y el resultado perinatal ha sido mejor.

La embarazada desnutrida es aquella con un peso inferior a 47 kg o que tiene un 20% menos del peso adecuada para su talla y edad. En estos casos aumenta el riesgo de una preeclampsia, de una hemorragia anteparto y de un parto prematuro.

Cuando la ganancia de peso es inferior a 1 kg mensual durante los dos últimos trimestres, se considera que el incremento es deficiente. Los hijos de dichas madres tienen una probabilidad mayor de nacer con bajo peso.

Se considera que la ganancia es excesiva cuando el aumento mensual durante el segundo y tercer trimestre es superior a 3 kg. No se ha encontrado asociación con la hipertensión inducida por el embarazo pero si con la obesidad postparto.

Se ha observado que las madres con poco peso, pero con una buena ingesta alimentaria durante su gestación, tienen bebes, cuyo peso ha sido influenciado por dicha ingesta adecuada. La dieta suplementaria especialmente con proteínas y grasas saludables mejora el peso del recién nacido.

ganancia de peso en el embarazo

Imagen 3. Esquema representativo de la ganancia progresiva de peso durante el embarazo.

Conclusiones.

  1. La malnutrición en el periodo de periconcepción es un factor de riesgo más importante que incluso la nutrición posterior en el embarazo.
  2. La materna con bajo peso previo al embarazo, combinado con aumento de peso reducido durante el embarazo tiene un efecto aditivo sobre el riesgo de lactantes pretérmino y con bajo peso al nacer
  3. En el caso de mujeres que aun están creciendo o que tienen trastornos de la alimentación pueden producirse competencia por nutrientes

Dra. Marleny Beltrán Floriano.

Médica y Cirujana.

Diplomado en Medicina Estética.

Nutrición en la preconcepción 1

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