El Síndrome de Colon Irritable, o enfermedad Celíaca, la Migraña y la enfermedad de Alzheimer, pareciera que no tuvieran nada en común, pero no es así, las últimas investigaciones revelan que son enfermedades hermanas, que pese a ser multifactoriales, tienen en común varias de sus causas, mucho en su fisiopatología y demasiado en común en su tratamiento.
En primera instancia, vale la pena mencionar que la clasificación anatómica en sistemas: Neurológico, Digestivo, Endocrino, Inmune etc. Es más un ordenamiento creado por el hombre, para un mejor entendimiento del ser humano; pero, la realidad es que el organismo funciona como un todo, y los órganos se encuentran interrelacionados entre sí por múltiples vías.
Esta situación se ha vuelto mucho más visible en el caso de las enfermedades neurológicas, que se relacionan con causas intestinales.
Llamó la atención de los investigadores, que el 75% de los niños con autismo, sufre también problemas gastrointestinales y que, al mejorar la dieta de estos niños, ceden los síntomas de Intestino Irritable, pero, también mejoran sus síntomas Neurológicos Arroyo et al. (1).
Eje intestino Cerebro (Gut – Brain – Axis).
El Eje Intestino – Cerebro consiste en una conexión bidireccional entre el intestino y el cerebro, que coordina varias funciones en ambos órganos.
1. Comunicación Neurológica:
El nervio vago recibe este nombre por ser un nervio errante, con cuatro tipos de fibras nerviosas, motoras y sensitivas, que inervan el oído, el corazón, la laringe, la faringe, el esófago, los intestinos, bazo, riñón e hígado. Y envía señales desde el intestino hacia el cerebro y viceversa.
Imagen 1. Inervación del Nervio Vago. Fuente: Anatomía Clínica de Moore (2)
2. Comunicación Endocrina:
La comunicación desde el cerebro al intestino se hace a través del eje hipotálamo – pituitario –adrenal que es un sistema organizado de comunicación hormonal.
Y en sentido contrario del intestino al cerebro, mediante la liberación por parte de las células intestinales de sustancias, que tienen acción a nivel de Sistema Nervioso Central, ejemplo Neuropéptido, Colecistoquinina, Grelina etc. cumplen funciones en el control del hambre.
3. Comunicación Metabólica:
A través de síntesis directa de neurotransmisores (Dopamina, Serotonina, GABA, catecolaminas), La mayoría son sintetizados por la microbiota intestinal,
La microbiota intestinal son bacterias que colonizan nuestro intestino, representan hasta 2 Kg del peso de una persona adulta.
4. Comunicación Inmunológica:
También tiene que ver con la microbiota intestinal, ya que algunos alimentos, especialmente el azúcar y los alimentos ultraprocesados favorecen el crecimiento de bacterias Gram Negativas perjudiciales, que sintetizan Lipopolisacáridos (LPS) que son altamente inflamatorios y generadores de alergias.
Mientras que, si se consumen alimentos beneficiosos, como verduras, frutas, cereales, que actúan en calidad de prebióticos proliferan bacterias beneficiosas, especialmente Bifidobacterias y Lactobacilos, que sintetizan Polisacárido Capsular A, que tienen efectos completamente opuestos (3).
Imagen 2. Mecanismos de comunicación bidireccional del eje Intestino – Cerebro a través del sistema Endocrino, a través de moléculas metabólicas y a través del sistema inmune. Fuente: Lach G.
Gluten.
El gluten son un conjunto de proteínas de bajo valor biológico, que se encuentran naturalmente en el trigo, en la cebada y en el centeno.
Las proteínas más inmunogénicas del gluten son la gliadina y la gluteína.
La combinación de una microbiota intestinal poco saludable (abundantes gram negativos), con la presencia de gliadina o gluteína, puede conducir a un estado de aumento de permeabilidad intestinal en individuos suceptibles Gordillo (4).
Las bacterias gram negativas secretan Lipopolisacaridos (LPS), que al unirse con las proteínas del gluten, conforman un complejo LPS-gliadina.
El complejo LPS-Gliadina se une a receptores TLR del intestino, desencadenando una racción inflamatoria, que involucra macrófagos y linfocitos.
Los linfocitos secretan anticuerpos que atacan varios órganos del cuerpo incluido el hígado.
Imagen 3. Complejo LPS Gliadina que desencadena un proceso inflamatorio intestinal, aumento de permeabilidad intestinal e inflamación hepática. Fuente Musoles (3)
Daño neurológico.
El aumento de la permeabilidad intestinal, lo que permite la entrada de LPS a la circulación en un proceso llamado endotoxemia.
De la misma forma como se produce inflamación y aumento de la permeabilidad intestinal, ocurre inflamación y aumento de la permeabilidad de la barrera hematoencefálica, que proteje el cerebro.
Imagen 4. Representación esquemática de la barrera intestinal a la izquierda y la barrera hematoencefálica a la derecha.
La pérdida de protección de la barrera hematoencefálica, deja vulnerable al cerebro para la entrada de moléculas, que normalmente no deberían ingresar.
Imagen 5. La presencia de bacterias gramnegativas (gnb) en el lumen intestinal (IL) provocan liberación de lipopolisacáridos (LPS); los LPS inducen aumento de permeabilidad de la barrera intestinal (IB) con la consecuente entrada de LPS a la circulación sanguínea.
Concomitantemente las gnb producen disminución de los niveles triptófano en sangre (Trp); el Tpr es el sustrato para la producción de serotonina (5-HT) que se ve disminuida en el cerebro.
Todos estos eventos llevan a alteración de la barrera hematoencefálica (BBB), que a su vez degenera en cambios metabólicos negativos en las neuronas. Gut-Brain Axis, eje intestino cerebro. Fuente: Elaboración propia.
Los síntomas neurológicos desencadenados por el consumo de gluten en personas sensibilidad al gluten pueden ser muy variados: migrañas, ataxias, y demencia tipo Alzheimer Perlmuter (5).
El único tratamiento efectivo para la sensibilidad al gluten, es una dieta libre de gluten.
Dr. Andrés Naranjo Cuéllar.
Médico y Cirujano.
MsC en Nutrición.
Bibliografía
(2) Moore Keith L. Anatomía con orientación Clínica. Ed Médica Panamericana
(3) Fernandez Musoles Ricardo. Componentes Funcionales y Bioactivos de los Alimentos. Universidad Internacional de Valencia.
(4) Gordillo Bastidas Daniela, Gordillo Bastidas Elizabeth. Nutrición Molecular. Ed Mc Graw Hill 2015.
( 5) Perlmutter, David. Cerebro de Pan. Ed Grijalbo 2018